No cabe duda de que en la actualidad muchos de los viajes que se organizan tienen en la gastronomía uno de sus grandes alicientes. O incluso, su principal atractivo. Y en Marruecos puede ocurrir lo mismo. Por ello, en este blog dedicamos también algunos posts a los platos más famosos y característicos del país. Este es uno de ellos: el tajine marroquí. Toma nota para saber cómo es y dónde se puede comer.
Qué es y qué lleva el tajine marroquí
El tajine marroquí, también llamado a veces tajín, es uno de los platos más famosos del país. Es, para entendernos, como la paella en España. Y como ocurre con ella, no se puede decir que hay una sola receta, sino muchas. Y algunas son tan sabrosas, originales y diferentes entre sí como la de pollo con limón y aceitunas, la de cordero con membrillo caramelizado, la de ternera con verduras, la de kefta o la de sardinas, entre otras muchas.
Esos son los ingredientes protagonistas de sus respectivos tajines, pero hay otros de fondo que a menudo marcan la diferencia entre un buen tajín y otro extraordinario. Aquí, la lista de nuevo es enorme, aunque algunos muy típicos de Marruecos son los garbanzos, las nueces, las zanahorias, las ciruelas, las almendras o las uvas pasas. Y por supuesto, las especias, que dan el toque final y genial: cilantro, cúrcuma, jengibre y muchas más, además de la mezcla perfecta de todas ellas: Ras el Hanout. Por último, otra de las cosas que no puede faltar es el cuscús para acompañar, algo que te ofrecerán en todos los restaurantes donde se sirve este plato.
Cómo se cocina un tajine
Aunque en tu viaje a Marruecos solo te encargarás de saborearlo y no de cocinarlo, es interesante saber cómo se hace, pues te ayudará a entender el resultado final. Retomando el anterior paralelismo con la paella española, el tajine marroquí se caracteriza también por el recipiente usado para su elaboración. En este caso, llamamos tajine al plato de barro barnizado, con poco fondo, sobre el que se sitúa una inconfundible tapa cónica.
Esta tapa no se utiliza por casualidad ni para decorar. Es lo que le da el toque final al plato, que sigue estos pasos: al principio, los ingredientes se sofríen en aceite de oliva generalmente con cebolla y ajo, posteriormente se estofan en un concentrado de tomate u otro caldo y por último se dejan cocinar a fuego muy lento con la mencionada tapa cónica, sacándole así todo el sabor a cada ingrediente. ¿El objetivo de esta tapa cónica? Evitar que el vapor se pierda y el plato se reseque, por lo que se logra concentrar dicho vapor en lo alto de la tapa, dejando que se precipite de nuevo sobre el estofado.
Dónde comer este plato en Marrakech
Como puedes imaginar, la lista de restaurantes que cocinan el tajine marroquí en este país es, sencillamente, interminable. Pero la experiencia de nuestra agencia, que nos lleva a todos los rincones de Marruecos y a las mesas de los locales más variopintos, nos permite darte algunos nombres con los que quedarás más que satisfecho:
- Bazaar Café, en Marrakech
- Al Fassia
- La Mamounia
- La Maison Arabe
- Dar Yacout
- Bakchich Café