En un post anterior de este blog hablábamos de los djinn, duendes o genios fantásticos de la tradición árabe. Probablemente el más famoso en todo Marruecos, y también el más temido, es un djinn femenino: la Aisha Kandisha. Su historia y detalles varían de una región a otra, pero en todas causa el mismo pavor. Contada a los niños desde pequeños, a menudo para mantener a raya su comportamiento, está también presente en la mente de muchos adultos, especialmente en zonas rurales. A continuación te contamos más sobre este personaje tan vivo en la cultura marroquí.
Aisha Kandisha: una mujer de terrorífica belleza
Aunque hay varias versiones sobre la Aisha Kandisha, también llamada Aicha Kandicha, todas destacan la extraordinaria belleza de este duende femenino. Una belleza que se podría considerar de terrorífica o embrujante, pues la emplea para seducir a quienes la observan y después someterles a un cruel final: la muerte, infringida por ella misma o por su propio suicidio.
A menudo es descrita como una hermosa mujer de cintura para arriba, pero con piernas de cabra o camello. También se la representa a menudo con manos de carnero y/o uñas de gallina. Sus facciones son chocantes, si las comparamos con las de una mujer estándar magrebí: piel extremadamente blanca y largo cabello pelirrojo, aunque también puede ser negro.
Otra característica común es su relación con el agua. Todas las versiones sitúan su hábitat natural en las aguas del mar, en los cursos de los ríos o incluso en lo más profundo de los pozos. De estos lugares saldría, casi siempre en la oscuridad de la noche, para dar caza a sus víctimas.
La Aisha Kandisha
¿Huérfana y verdugo de portugueses en Mazagan?
Una de las versiones más extendidas sobre la Aisha Kandisha la describe como una joven huérfana que perdió a toda su familia por las tropelías del ejército portugués siglos atrás, en la ciudad de Mazagán, hoy El-Jadida. Ella, para vengarse de su sufrimiento, utilizaba su belleza para seducir a los soldados y, a continuación, matarlos.
¿Hija del Conde don Julián?
La otra versión más famosa, especialmente en el norte de Marruecos, indica que la Aisha Kandisha era la hija del Conde don Julián, gobernante de Ceuta que llegó a un acuerdo con los ejércitos árabes para facilitar su desembarco y posterior conquista en la Península Ibérica. El general Tarik, al frente de las tropas, exigió al Conde don Julián a su hija como garantía. Así, la hermosa joven, que acudía cada noche a bañarse en las aguas del Estrecho, sería también la enigmática figura del Monte Musa, conocido como la Mujer Muerta por la forma que tiene esta montaña cuando se observa desde Ceuta. Esta versión explicaría el nombre de Aisha Kandisha, que derivaría de Conde, Condesa o Condisha.
Como puedes deducir de este post y de otros de nuestro blog, la tradición oral marroquí es muy rica. La Aisha Kandisha y su historia terrorífica es solo un ejemplo. Si quieres aderezar tu viaje con esta y otras leyendas, confía en Turismo Marruecos: no solo podemos proporcionarte guías turísticos con conocimiento en la materia, sino también chóferes locales que estarán encantados de contarte detalles sobre su cultura.
