Viajar a Marruecos con niños es un acierto seguro, especialmente para las familias con espíritu más inquieto, curioso y explorador. Y en este artículo del blog te damos algunas ideas que puedes valorar para organizar tu viaje, así como indicaciones sobre seguridad y precauciones. ¡No habrá nada que os detenga!
Planes para disfrutar de Marruecos con niños
Cualquier viaje a Marruecos con niños es, en sí mismo, toda una experiencia que quedará grabada en la memoria. En este país todo es diferente, y eso llamará mucho la atención de los más pequeños. Sus paisajes urbanos, las vestimentas de sus ciudadanos, los templos, la comida y otros detalles del día a día les recordarán escenas que solo han visto en el cine o en los cuentos.
Pero además de ello, hay algunos planes catalogados como familiares que les encantarán. En el eje Rabat-Casablanca, el más poblado y moderno del país, encontraréis varias de las propuestas más adaptadas a los benjamines de la casa. Por ejemplo, los principales zoos del país. Uno de ellos es Dream Village, entre Casablanca y Mohammedia, con más de 1.000 animales salvajes y una gran zona de juegos infantiles. También destaca el Jardín Zoológico de Rabat, distribuido en 5 ecosistemas: Montañas del Atlas, Sabana, Desierto, Zonas húmedas y Bosques tropicales.
En Rabat se encuentra también otro de los museos más recomendables para quienes viajan a Marruecos con niños: el Museo de Ciencias de la Tierra, con un espectacular esqueleto de saurópodo. En Marrakech, por su parte, destacan los Jardines Majorelle, un bonito espacio para aprender sobre la botánica, con juegos adaptados a los más pequeños.
Y más al sur, el desierto del Sahara se convierte en un escenario mágico que fascinará a los niños. En su entorno se encuentra uno de los museos más sorprendentes para unos ojos infantiles: los Atlas Studios, con atrezzo de famosas películas que allí se han rodado. Y si os animáis, en la memoria les quedarán las travesías en camello por las dunas del desierto y las noches en las jaimas bereberes, un alojamiento que les parecerá de lo más extraordinario y divertido. ¡Ah! Y si tus hijos son fans de las calcamonías, ¿qué mejor que un buen tatuaje de henna natural en alguna de las ciudades que visitéis?
La seguridad de un país muy familiar
Visitar Marruecos con niños no entraña ningún riesgo especial y solo necesitaréis tomar las clásicas precauciones que se siguen cuando se visita un país diferente con los hijos. De hecho, Marruecos es un país muy familiar en el que sus habitantes tienen especial cariño por los más pequeños, pues están rodeados de ellos en sus casas y barrios.
Si quieres conocer consejos concretos, puedes visitar nuestra página de Viajar con niños, donde te damos indicaciones básicas como no perder de vista a los niños (¡las medinas pueden resultar laberínticas!) o evitar las horas de mayor radiación solar, pues las temperaturas que se pueden alcanzar aquí en verano son realmente altas. Y ármate de paciencia si viajas con bebés o niños en edad preescolar, pues los espacios públicos no siempre están adaptados con cambiadores y similares.
Y si realmente necesitas una mano con tu viaje, cuenta con Turismo Marruecos. Nos encargaremos de organizar hasta el más mínimo detalle, con profesionales que os podrán acompañar la mayor parte del tiempo, si así lo necesitáis.