La Cueva de Friouato, conocida en Marruecos por su nombre en francés (Grotte du Friouato), es uno de los lugares más espectaculares del centro-norte del país. Y sin duda, una actividad obligada para los amantes de la espeleología. En este artículo te contamos dónde está esta cueva y por qué visitarla durante tu viaje por Marruecos.
Dónde está la Cueva de Friouato
La Cueva de Friouato forma parte del Parque Nacional de Tazzeka y está a unos 25 km de la ciudad de Taza, la más cercana. Esa distancia se cubre en un trayecto de, aproximadamente, 40 minutos. Desde Fez, el trayecto sube hasta los 140 km y algo más de dos horas de viaje por carretera.
No es la única de este parque nacional, pues también hay otras como la de Bouslama, ni tampoco del país, como puedes ver en este post sobre la de Hércules. Sin embargo, es la más grande de esta reserva natural y, según distintas fuentes, la más grande y profunda de todo el norte de África: los espeleólogos han explorado unos 300 metros, pero se cree que puede duplicar o incluso triplicar esa cifra.
Por qué visitar la Cueva de Friouato
La Cueva de Friouato supone todo un monumento natural de primer orden, tanto por su belleza como por su misterio y su interés para los expertos en geología. La boca de entrada a la sima es muy ancha y cuenta con una escalera que recorre una de sus paredes, hasta llegar a suelo firme, de donde parten sus diferentes galerías. A partir de ese momento, las galerías se hacen más estrechas y en algunos puntos hay que echar el cuerpo a tierra.
Desde el punto de vista geológico, llaman la atención las numerosas y espectaculares estalactitas que cuelgan del techo, así como otras formaciones en forma de cortinas o banderas, como en la llamada Salle de Draperies. Todo ello formado por la acumulación de sedimentos fruto de las filtraciones de agua, durante millones de años.
Otra razón para visitar la Cueva de Friorato es, precisamente, su escasa presencia de visitantes, pues es relativamente poco conocida, especialmente entre los turistas extranjeros. Eso ayuda a mantener un ambiente de tranquilidad, de modo que el visitante puede concentrarse en admirar las formaciones rocosas y en sentir el ambiente con todos sus sentidos.
Por otro lado, la Cueva de Friouato tiene para muchos un cierto interés sobrenatural, casi esotérico. Su particular disposición en forma de gran sima que entra en la tierra sin ver el final ha dado pie a diferentes interpretaciones, y no faltan aquellos que dicen que podría ser una entrada al centro de la tierra o al infierno.
Recomendaciones para visitar la Cueva de Friouato
Si la belleza y el interés geológico son suficientes para convencerte de su visita, debes tener en cuenta una serie de detalles. El primero es el equipamiento que deberás llevar: aunque a la entrada proporcionan casco con linterna y funda de zapatos, lo recomendable es que lleves calzado cómodo con suela antideslizante, pues la roca puede estar resbaladiza en muchos de sus tramos. Además, la ropa que uses puede mancharse, por lo que se recomiendan prendas de fácil lavado o incluso que no tengas problemas en desechar después.
Los escalones de bajada superan los 500, por lo que la vuelta puede ser dura. Además, al haber tramos muy estrechos, la visita está sólo recomendada para personas en buena forma y movilidad física, sin claustrofobia.
Además, debes tener en cuenta que se han producido accidentes, incluso mortales, en esta cueva, obligando después al cierre temporal al público. Por ello, te aconsejamos que consultes antes si está abierta para la visita.
Imagen de Taza46, Licencia CC BY-SA 4.0